En Juan Guzmán no pueden ponerse “ni un zapato nuevo”
Las calles de Juan Guzmán, no son calles. Son veredas, abiertas por el paso de los lugareños, que desaparecen una vez llega la temporada de lluvias. Una cañada y una laguna, que se formó a partir del agua estancada, mantienen en amenaza constante a los residentes de este sector de Manoguayabo, que ven inundarse sus débiles ranchos, hechos de madera y zinc…